Como baldazo de agua fría. El Tribunal Federal de Justicia de Alemania no se anda con rodeos cuando se trata de respetar la Constitución.

Mujer tansexual quiso burlarse de las leyes al intentar registrarse como “la madre” de su recién nacido. Título que no le corresponde, porque “ella” habría descongelado su esperma para que su pareja pudiera concebir a su primogénito; en sencillas palabras, es el padre. Ante esta trabalenguas versión ideología de género los jueces alemanes respondieron.

“Según la Biología es el padre de la criatura, puesto que se utilizó su esperma para la fertilización del óvulo de su actual pareja femenina. Nació varón, congeló sus espermatozoides para una futura ocasión, que ha sido junto a la mujer con la que, en teoría mantiene una relación ‘translésbica’”, manifestó el Tribunal.

Mas claro que el agua. Para el Tribunal alemán no se puede alterar la maternidad, menos la paternidad que han sido determinados biológicamente y este orden no puede ser intercambiable. Caballero nomás, tiene que inscribirse como el padre de la criatura, no hay de otra.

Frente a la inestabilidad social las leyes en Alemania y el orden biológico se respetan.

El caprichoso caso de la pareja ‘translésbica’ no ha sido el único ante los tribunales, uno similar fue, el caso de un hombre transexual, que exigía inscribirse como el padre del niño y también recibió un rotundo no.